Aquí tenéis la carta de amor que Gonzalo C. ha escrito a una amiga muy especial.
Bonita, escribo esta carta (aunque tú sabes que estas cosas no van conmigo), para decirte, aunque tarde, que desde el primer momento que te vi la cara, quedé prendado de esos ojos negros, de tu pelo sedoso y dorado, de tu fuerza y entusiasmo.
Recuerdo, cuando sin necesidad de decir nada pasábamos la tarde acurrucados en el sofá. Cuando estaba de bajón, tú me dabas la fuerza para seguir adelante y de esos largos y maravillosos paseos que tu convertías en aventuras.
Siempre sin pedir nada. A cambio estuviste a mi lado hasta ayer, no porque tu quisieras irte, sino porque tu corazon no pudo más. Me dejaste solo, sin mi mejor amiga y compañera. Siempre te recordaré y guardaré en mi corazón los pequeños momentos pasados juntos. Desde el día en que llegaste a casa en una cesta, pequeña, indefensa y alegraste con tus ladridos nuestras vidas.
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